Sobre el billón de recaudación

El análisis económico del día. Superar el billón de pesos de recaudación tributaria nacional es anecdótico.

La evolución de la recaudación de distintos impuestos muestra, entre otras cosas, que los números y discursos oficiales no cierran entre sí, algo natural cuando hay dibujos estadísticos.


Fue noticia que la recaudación tributaria nacional superó en 2014 el billón de pesos. Un uno seguido de doce ceros.

Este record, como cualquiera de los anteriores, no tiene demasiada importancia.

Es común que todos los meses el Gobierno Nacional enfatice que alcanzó una recaudación record. Pero, con inflación de dos dígitos, lo natural es justamente encontrar un record seguido de otro.

Es más interesante analizar la evolución de la recaudación de distintos impuestos. Permite realizar, entre otras, las siguientes observaciones:

La evolución de la recaudación encaja más con los datos privados que con los oficiales.

Los datos indican, en números redondos, inflación del 24% y crecimiento de 0%, en el caso de las estadísticas oficiales, e inflación del 38% y crecimiento de -2% en el caso de las estadísticas privadas.

Con estos números, antes de conocer los resultados de recaudación, alguien que confíe en los números oficiales apostaría seguramente por un incremento de la recaudación de impuestos vinculados a la actividad económica y los precios, como el Impuesto a Débitos y Créditos Bancarios, o “impuesto al cheque”, cercano al 24% (24% de inflación + 0% de crecimiento).

Mientras que alguien que confíe en los números privados apostaría por un incremento de recaudación en torno al 36% (38% de inflación – 2% de crecimiento).

Resulta que la recaudación de ese impuesto se incrementó, justamente, 36% durante 2014 (algo parecido ocurrió con IVA).

Refleja el atraso salarial que el Ministro de Economía niega.

Según el Ministro Kicillof, durante 2014 los salarios aumentaron su poder adquisitivo. No encaja con recaudación de seguridad social creciendo 30% y recaudación del impuesto al cheque creciendo 36%.

El Ministro podría argumentar que los precios efectivamente subieron 24% y los salarios 30% (por eso subió 30% la recaudación de seguridad social), recuperando así poder adquisitivo. Pero le resultaría difícil explicar cómo subió entonces 36% la recaudación del impuesto.

Si argumentara que la actividad económica subió 12%, complementando la inflación del 24% para alcanzar aquel 36%, el crecimiento del PBI no podría ser nulo como muestran las estadísticas oficiales. Nuevamente, no cierran los números.

Subas de recaudación del 30% en seguridad social y del 36% en impuesto al cheque encajan con una inflación del 38%, con 2% de caída de actividad económica y 8% de pérdida de poder adquisitivo de los salarios.

Refleja el aumento de la presión impositiva por Impuesto a las Ganancias.

La recaudación del impuesto a las Ganancias se incrementó 46% en 2014. Son 22 puntos porcentuales más que la inflación oficial y 8 puntos porcentuales más que la inflación privada.

Consecuencia obvia de la estrategia del Gobierno de aprovechar la inflación para aumentar la presión tributaria de un modo artificial y arbitrario (más detalles, click aquí).

Las cifras oficiales de recaudación son entonces coherentes con lo que el Gobierno niega: que cayó el poder adquisitivo de los salarios y que está aprovechando la inflación para aumentar la presión del Impuesto a las Ganancias.

Y confirman que es posible dibujar estadísticas económicas, pero no ocultar los rastros del engaño.

Por eso luego no cierran entre sí los propios números oficiales.

El análisis económico del día. Por Gastón Utrera.