1.- Dos claves de análisis para anticipar lo que puede ocurrir con el dólar durante 2019: (a) todos los años de elecciones presidenciales se produce dolarización de carteras, es decir, decisiones de ahorristas e inversores de pasar sus activos financieros de pesos a dólares y (b) el año próximo será el primero en el cual, cuando se produzca esa dolarización de carteras, el BCRA no podrá intervenir vendiendo dólares.
2.- La consecuencia natural de estos dos elementos es que el dólar seguramente subirá, y podría hacerlo bruscamente, porque hay demasiada distancia entre las bandas inferior y superior del esquema de bandas cambiarias, porque ambas bandas son crecientes en el tiempo y porque el tipo de cambio comenzará el año cerca de la banda inferior. Desde el tipo de cambio actual hasta el valor que tendrá la banda superior a fines de junio hay una distancia de más del 40%.
3.- Hay quienes creen que esto no generará problemas porque no hay suficientes pesos para la compra de dólares, por efecto de la política monetaria contractiva. No tienen en cuenta que el stock de plazos fijos aumentó en más de 700 mil millones de pesos en el último año, monto que podría dolarizarse en cuanto empiecen las señales de suba del dólar. Serían casi 20,000 millones de dólares de demanda por atesoramiento, el doble de lo que vendió el BCRA durante la dolarización de carteras de 2015 y cuatro veces lo que había vendido durante 2011, antes del cepo cambiario.
4.- Es un riesgo enorme enfrentar un año electoral con dólar libre, dentro de una zona de no intervención demasiado amplia, y con el compromiso de no emisión de dinero. El riesgo es nueva inestabilidad cambiaria y, encima, mayores tasas de interés. Esto es consecuencia de que, en caso de que el dólar empiece a subir, la reducción del stock de depósitos a plazo fijo haría difícil la renovación de Leliqs y, como el BCRA no puede emitir dinero para pagarlas, tiene que subir tasas de interés para lograr su renovación.
5.- Una posible salida de esta encerrona en la que se ha metido el Gobierno Nacional es una nueva renegociación del acuerdo con el FMI, para reducir drásticamente la amplitud de las bandas cambiarias y para salir del compromiso de no emisión de dinero, que no permite pagar Leliqs y genera altas tasas de interés. Sólo podría ocurrir luego de que el presidente comprenda, ya entrado 2019, que esta combinación de políticas económicas es inviable.
6.- Luego de lo ocurrido durante 2018, y con las perspectivas para 2019, los precios relativos seguramente continuarán muy volátiles, y esto generará muchos riesgos y oportunidades para las empresas en cada sector de actividad. Estimar mensualmente, con precisión, los costos, definir adecuadamente los precios y cuidar el frente financiero serán desafíos para la mayoría de las empresas.
Síntesis de lo expuesto en el último desayuno económico de Punto a Punto (13.12.2018). Nota aquí: Desayuno PaP pag1 Desayuno PaP pag 2